Preocupa la presión arterial elevada en Latinoamérica

Una de cada 3 personas padece hipertensión arterial en América Latina. Sin embargo, casi la mitad de los hipertensos no sabe que padece esta enfermedad, que muchas veces no presenta síntomas pero aumenta significativamente los riesgos cardiovasculares y causa 800.000 muertes cada año en países latinoamericanos. Para generar conciencia sobre la importancia de mantener controlada la presión arterial, cada 17 de mayo se celebra una jornada especial en la que se recuerda que los valores normales de presión son 140/90 mmHg o, como se conoce popularmente, 14/9.

Preocupa la presión arterial elevada en Latinoamérica

La presión arterial sistólica o máxima (normalmente, hasta 140 mmHg o milímetros de mercurio) es la fuerza ejercida por la sangre sobre las arterias cuando el corazón se contrae. La presión arterial diastólica (90 mmHg) refleja la presión existente en las arterias cuando el corazón está en reposo. En más del 90% de los casos, se desconoce la verdadera causa de la hipertensión arterial (una medición repetida mayor a 140/90 mmHg), pero es importante que todos los hipertensos reciban un tratamiento adecuado para no sufrir consecuencias graves.

Según la Organización Mundial de la Salud, la hipertensión está detrás del 51% de las muertes causadas por un accidente cerebrovascular (ACV) y del 45% de las muertes que sobrevienen tras un infarto de miocardio. Además, hay que considerar que la presión arterial aumenta con la edad. El 60% de los mayores de 65 años sufre de hipertensión, lo cual aumenta el riesgo de infarto de miocardio, ACV, insuficiencia cardíaca y problemas renales.

Tanto hombres como mujeres, jóvenes y ancianos, pueden sufrir de hipertensión, un problema que afecta del 20 al 40% de la población latinoamericana, dependiendo de los países, geografías y situación económica.

En Perú, por ejemplo, la población que vive en las grandes ciudades muestra una prevalencia de hipertensión del 27,9%, mientras que 21,9% de los habitantes de zonas rurales (sierra y selva) sufren de hipertensión, de acuerdo con un estudio encabezado por Enrique Ruiz Mori, presidente de la Sociedad Sudamericana de Cardiología. En la altura, hay menos hipertensión arterial que en la costa peruana. Pero en todas las zonas naturales de Perú, la hipertensión arterial ha aumentado significativamente en los últimos años.

En Colombia, según datos de aseguradoras recogidos por el Fondo Colombiano de Enfermedades de Alto Costo en el año 2015, 3.133.507 personas tienen diagnóstico de hipertensión arterial, lo que equivale a un 6,5% de la población, una cifra muy por debajo del promedio latinoamericano, por lo cual se estima que hay muchos hipertensos todavía no registrados.

En cuanto a la Argentina, los especialistas coinciden en que la hipertensión arterial está creciendo. La última Encuesta de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación (2013) mostró que el 34% de los argentinos mayores de 18 años declara tener hipertensión arterial. Respecto de los cambios registrados en los últimos tiempos, según datos del registro RENATA II, el 36,3% de los argentinos tenía en 2016 valores elevados de presión arterial, un 8% más que en el año 2008.

Hipertensión arterial en países de América Latina año 2010

Alimentación saludable y ejercicio físico

Si bien cada vez hay más opciones farmacológicas para tratar la presión arterial, los cardiólogos recomiendan hoy prestar especial atención al estilo de vida. Una alimentación con altos contenidos de frutas y verduras, sumada a un bajo consumo de sodio (menos de una cucharita diaria de sal), son las recomendaciones habituales para los hipertensos.

En los últimos tiempos, además, distintos estudios han mostrado que no se trata únicamente de retirar los saleros de las mesas y de no agregarle sal a las comidas. También hay que consumir más potasio, magnesio y calcio, minerales que ayudan a mantener la presión controlada y que se encuentran presentes en bananas, paltas, batatas, arvejas, tomates, espinaca y atún, entre otros alimentos. El potasio, en especial, ejerce una acción fundamental en las células de los vasos sanguíneos para bajar la presión arterial.

Para disminuir los niveles de presión también se recomienda evitar el sedentarismo, practicando media hora de actividad física diaria, y moderar el consumo de alcohol. Es importante que las personas con sobrepeso disminuyan sus kilos, ya que la obesidad y la hipertensión están asociadas, y es indispensable que ningún hipertenso fume.

La presión arterial de adultos y niños debe ser chequeada regularmente en el consultorio médico. Los especialistas señalan que hay que realizar 3 tomas sucesivas y promediar los valores obtenidos, para estar seguros de que la presión arterial es mayor a 140/90.

Qué comer para bajar la presión arterial


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